Galletas decoradas con Fondant

Hace ya unos días que preparamos estas galletas entre mi hija pequeña y yo, pero hasta hoy no había tenido ocasión de subir las fotos, así que aprovecho para todos los que celebréis San Valentín y os propongo esta idea de galletas decoradas.

En realidad la decoración de galletas con fondant es un juego de niños, igual que jugar con plastilina, enrollar, cortar, pegar... lo divertido es imaginar la forma en que vamos a decorarlas, elegir los colores, y ponerse manos a la obra.
Estos han sido mis utensilios, y por supuesto, el fondant y los tintes.

El fondant que he usado es blanco, así que he usado unos tintes en gel para teñirlo en varios colores. Ponemos una pizca de colorante en un trozo de fondant, y lo amasamos bien hasta que el color sea uniforme, entonces lo extendemos bien en una superficie que no pegue. Aquí mi ayudante extendiendo un trozo.

Para pegar el fondant en las galletas, se necesita agua y un pequeño pincel, nada más. Para pegar fondant sobre fondant, hacemos lo mismo, más fácil imposible. Estas son las primeras, con forma de flor.

Aquí cambiamos de colores, y seguimos con el diseño de la flor.

Ahora hacemos un dibujo de rayas en dos colores

Como veis, se trata solo de teñir, estirar, cortar y pegar...

Si disponéis de cortadores, es más fácil, y si no, usad los que tengan los niños para la plastilina, tapones de botellas, o lo que se os ocurra que tengáis por casa.

Así que ya sabéis, si queréis pasar una tarde divertida con los niños, esta es una opción fantástica. Para nosotras era nuestra primera experiencia en decorar galletas y nos encantó, estamos deseando repetir!

Ah, y si os preguntáis si el sabor es bueno, os diré que es buenísimo, y además el fondant ayuda a que las galletas no se endurezcan y duran mucho en buen estado.