Siguiendo con el cargo de conciencia pos-navideño, hoy os traigo una receta de cocina sana y rica, con la que he llenado un par de tarteras para llevar al trabajo esta semana. Compré un paquete de judías verdes y para no hervirlas, hacer el sofrito, etc..., decidí prepararlas en la Thermomix, todo en uno, usando el complemento varoma para cocinar al vapor. Esta es la receta.
Ingredientes
- Judías verdes peladas, lavadas y troceadas (la cantidad que soláis usar según los comensales. En mi caso era solo para mí, así que eran poquitas)
- 1 patata mediana o 2 pequeñas, peladas, lavadas y cortadas en rodajas de 1 dedo de grosor.
- 1 trozo de cebolla.
- 25 gr de aceite de oliva virgen extra
- sal y pimienta
- tomate natural triturado (yo usé unos 200 gr, si ponéis mas judías, usad más cantidad)
- 600 gr de agua
Preparación
Pelamos, lavamos y troceamos las judías verdes, las ponemos a escurrir en un escurridor.
Pelamos, lavamos y troceamos las patatas. Las colocamos sobre la bandeja del recipiente varoma y salpimentamos
Pesamos el aceite y calentamos 4 minutos a temperatura varoma, v2. A continuación añadimos la cebolla.
Programamos 4 minutos a temperatura varoma y v3 1/2. Esto hará que la cebolla se deshaga mientras se fríe.
Ahora añadimos el tomate y programamos 6 minutos a temperatura varoma y v2.
Añadimos el agua, la sal y la pimienta, ponemos el cestillo y colocamos las judías en él (yo aquí les puse un poco de sal más, pero no hace falta, salen bien sabrosas)
A continuación cerramos la tapa y colocamos el varoma en su posición con las patatas en él. Programamos 30 minutos a temperatura varoma y velocidad 3.
Como el punto de cocción dependerá de las patatas, pasado el tiempo, paramos la máquina y comprobamos el punto de las patatas. Si aún están duras o poco cocidas, programamos 5 ó 10 minutos más.
Si la patata ya está cocida, comprobamos las judías, si aún no están en su punto, quitamos el varoma y seguimos poniendo 5 minutos más solo a las judías. A las mías les ha bastado con 35 minutos en total, patatas y judías a la vez.
Salen jugosas y con todo el sabor del tomate, ya que a la velocidad que lo pusimos, el tomate fue "regando" las judías mientras se cocían. Ya están listas para pasarlas a la tartera, colocando las patatas encima.
En el fondo del vaso os habrá quedado caldo de tomate, con un sabor espectacular.
Podéis echarlo por encima en la tartera o bien apartar unas patatas y regarlas con el caldo de tomate.
Buenísimas es poco, espero que os gusten.
Un plato ligero, que bueno, después de las navidades toca comida ligera.
ResponderEliminarBesos
Cocinando con Montse